Al hacernos de una casa, no sólo nos hacemos de los metros cuadradros predializados y cartografiados en los documentos del contrato. Se incluyen algunos vecinos, sus sonidos vecinales, un barrio, un status y, cuando menos, un Oxxo.
Es por ello que todos tenemos nuestro Oxxo, ese donde los que atienden te saludan y saben qué tipo de cigarros Delicados llevarás. Ese al que llegas por las noches a pesar de que te desvíe dos cuadras y que hayas pasado por otros tres establecimientos iguales. Ese donde a través de los años ves como el niñito que nos empaca los refrescos crece hasta convertirse en todo un cholo que cualquier día nos asaltará.
Es por ello que todos tenemos nuestro Oxxo, ese donde los que atienden te saludan y saben qué tipo de cigarros Delicados llevarás. Ese al que llegas por las noches a pesar de que te desvíe dos cuadras y que hayas pasado por otros tres establecimientos iguales. Ese donde a través de los años ves como el niñito que nos empaca los refrescos crece hasta convertirse en todo un cholo que cualquier día nos asaltará.